La KMA 240(i) está montada en un semirremolque de plataforma baja y cuenta con una unidad de motor propia. Este concepto móvil permite el traslado ágil a los lugares de aplicación más diversos y una instalación rápida del equipo. Palas cargadoras agitan los más diversos materiales de partida no ligados y los pasan a través de rejillas hacia el interior del dosificador. Silos o camiones cisterna abastecen a la unidad con ligantes como cemento, emulsión bituminosa o betún espumado. Para la dosificación de alta precisión, un control de sistema regulado con microprocesadores monitoriza la adición de materiales de partida y ligantes a la cámara de mezcla. Allí, una robusta mezcladora de circulación forzada de dos ejes produce un material de construcción mixto homogéneo de alta calidad. Por último, el aglomerado acabado se carga sin problemas a través de la cinta de carga oscilante. Permite llenar por completo incluso trenes articulados largos.
La planta mezcladora móvil para el reciclado en frío KMA 240(i) genera de inmediato un material mezclado en frío listo para extender en las más diversas obras de construcción, como p. ej. capas de base ligadas de forma hidráulica (HGT) para autopistas. Gracias a la adición de cemento continua de grandes dimensiones se pueden conseguir con precisión enormes rendimientos por jornada.
Además de HGT y RCC (Roller Compacted Concrete), también se puede producir material mezclado en frío ligado con emulsión bituminosa o betún espumado (BSM).
Las calzadas fabricadas a partir de materiales mezclados en frío de alta calidad destacan después por su alta capacidad portante, su resistencia frente a la deformación y su larga durabilidad.
La planta mezcladora móvil para el reciclado en frío puede transportarse sin esfuerzo de una obra a otra e instalarse rápidamente en las inmediaciones de la obra. Así se ahorra tiempo y capacidad de camión y además es un método extremadamente respetuoso con el medio ambiente: hasta un 60 % menos de emisiones de CO2 gracias al tratamiento en frío, un 90 % menos de transportes y una reducción del 50 % en los costes totales en comparación con el método convencional... ¡un cálculo que sale a cuenta en todos los sentidos!
La ingeniosa estructura permite el «embalaje» fácil y seguro de la planta compacta sobre el remolque de cama baja, así como un traslado hasta el siguiente lugar de uso con ahorro de costes y tiempo. Solo hay que retraer la cinta de descarga y la cabina, poner en posición de transporte el sinfín transportador de cemento y a continuación acoplar la planta. Un tractor convencional basta para el transporte, ya que todas las conexiones son normalizadas.
A primera vista, la KMA 240(i) parece relativamente pequeña. Pero con su rendimiento ocurre exactamente lo contrario: esta máquina tan compacta despliega un montón de energía. Propulsada por un potente motor diésel, es capaz de producir material mezclado de alta calidad con un asombroso desempeño de 240 t / h o más. Este desempeño de mezcla es considerablemente superior incluso al de muchas grandes plantas estacionarias.
Pero el rendimiento no lo es todo, sino que también es decisivo el suministro continuado de material a la obra.
El acreditado sistema de carga de la KMA 240(i) lo garantiza. La cinta de descarga con amplio rango de oscilación permite llenar uniformemente los trenes articulados.
Con un desempeño de 240 t / h, en un ritmo de 5 minutos se produce una carga completa de camión con 20 t. Así, por ejemplo, se pue-de implementar cada día un enorme tramo de capa de base ligada de forma hidráulica o bituminosa con una anchura de 4,0 m, un espesor de 15 cm y una longitud de 1,4 km.
Los componentes importantes de la planta - la tolva de material, los dosificadores y la mezcladora de dos ejes con modo permanente- están perfectamente armonizados entre sí como el engranaje de un reloj: esto permite añadir los ligantes al material inicial pesado en la mezcladora de forma exacta y sincronizada. El resultado final es una calidad del material mezclado exactamente según la receta necesaria.
El innovador sistema de artesa doble dispone de dos modernas unidades de pesaje independientes entre sí. Esto permite dosificar el cemento de forma gravimétrica desde una artesa, mientras que la otra se va llenando al mismo tiempo con más cemento y se pesa de forma exacta. La dosificación alterna se realiza con la máxima precisión y sin interrumpir la adición de ligantes.